Inicio Análisis Análisis Card Shark – Análisis PC

Análisis Card Shark – Análisis PC

Las reglas estan para romperlas

Por Aitor Zuloaga León

Soy un muy fan de la magia. Me encanta ver como me engañan con grandes trucos visuales, ya sea a traves de una pantalla o en vivo. Dentro de este espectáculo, la cartomagia siempre me ha picado el gusanillo. Antes me sabía algun truco simple, pero si no los practicas constantemente es muy fácil cometer un error, no digamos olvidarlo. No hablemos ya de trucos verdaderamente complejos y no los que se aprenden facilmente en internet.

Pues Card Shark trata exactamente sobre esto, cartomagia. Pero en este caso, no usamos los trucos para sorprender a un público que quiere ser engañado. Los usamos para estafar a gente rica durante partidas de cartas, con el objetivo de dejarles sin blanca (obviamente) y sacarles información o ganar alguna apuesta si la situación lo requiere.

Desde Nerial Games nos presentan la Francia del S.XVIII y a nuestro protagonista, un francés (si, no todo iba a ser perfecto) mudo. Vivimos en una posada, donde trabajamos para la dueña. Al ser mudos, no es que nos traten bien precisamente, al final nuestras respuestas son muy limitadas y hace con nosotros lo que quiere. Hasta que un dia, gracias a una partida de cartas (no entrare en más detalles) nuestra vida da un giro completo, y acabaremos dedicándonos al noble arte del engaño.

Bajo esta premisa, Nerial nos vuelve a colocar bajo un prisma histórico, y a traves de la narrativa de su juego nos va presentando un contexto muy interesante, lleno de conspiraciones donde tendremos que sobrevivir a base de muchos trucos y nuestro ingenio. Al igual que la desarrolladora nos demostró con Reing (juego que recomiendo encarecidamente si no lo habéis jugado), nos consigue trasladar a otra época de una manera impecable. A esto hay que añadirle su estilo artístico, sacado de los cómics europeos, el cual ayuda a reflejar como era la Francia en aquella época, y dándole un aspecto visual perfecto al juego. Las cartas, los diferentes elementos de la mesa o las manos de tus contrincantes, hasta los diferentes emplazamientos en los que transitamos son tan bonitos, que te pasaras el juego sacando mil capturas. Lo digo por experiencia.

Lo malo de todo esto, es que a pesar de tener una ambientación tan bien trabajada, la historia deja bastante que desear. Aun teniendo varios giros inesperados, el juego se centra tanto en el gameplay que deja de lado la narrativa. La historia se va contando mientras jugamos diferentes partidas y genera poco interés. Los ritmos están muy mal llevados, pues empezamos teniendo un énfasis bastante importante en este aspecto. La historia tiene un comienzo interesante y mientras viajamos a nuevas zonas vamos descubriendo trucos nuevos. Todo para ponerlo a prueba en una partida importante. Hasta aquí todo bien, pero despues el juego deja de lado esta narrativa y se centra por completo en el gameplay. Vamos de partida en partida, y entre ellas tenemos una escena o dos relevantes para la trama. Esto, con la tensión que genera el juego, no ayuda, dando un ritmo bastante irregular y mal calculado, donde nos pasamos más tiempo tensos por una partida que interesados en nuestra historia. Y el que esta sea poco interesante obviamente no ayuda.

Viendo esto, es obvio decir que la piedra angular del juego es su gameplay. Y quiero dejar claro, que por mucho que ponga «Card» en el nombre, esto no es ningún juego de cartas como podría ser Heartstone o Magic. Esto es un juego de engañar a tu oponente, de usar trucos para sacarle toda la pasta e información posible. Y en ese aspecto lo borda. Tenemos más de una veintena de trucos a nuestra disposición, que iremos aprendiendo y mejorando a medida que avancemos en la trama. Todos tienen su momento y tendremos que aplicarlos meticulosamente. El gameplay esta medido al milímetro, tienes que tener cuidado con todos tus movimientos, perfectamente integrados en el mando. Cada accion tiene un objetivo claro, cada jugada es parte de la estafa. Y si queremos evitar que nos pillen, ya nos vale no cometer errores.

Porque sí, nuestros oponentes no son estúpidos. Bueno casi todos no lo son. Mientras jugamos la partida, tendremos un medidor que nos indicará cuanto sospechan de nosotros. Es importante mantener bajo control este medidor, porque obviamente no queremos que nos pillen. Esto le da una segunda vuelta al gameplay, al final la cartomagia no deja de ser un espectáculo, y como buenos actores tendremos que cumplir nuestro papel. De esta manera, mientras hacemos nuestro truco, tendremos que jugar también con la mente de nuestro oponente, para que se crea la mentira. Y esto creedme que se puede volver muy complicado a veces.

Bueno, para ser precisos, todo el juego se puede volver muy complicado, en parte por culpa de su ritmo tan acelerado. Como he dicho, al principio del juego, entre partida y partida, tenemos un descanso donde avanza un poco más la historia. Esto ayuda a bajar la tensión del jugador, trayendo unos intervalos bien medidos entre, partida (tensión) e historia (calma). Pero después desaparece, teniendo menos espacio entre partida y partida, generando más tensión. Encima tienes que hacer todo perfecto para que salga bien y no te pillen haciendo trampas y quieran matarte, de manera literal. Esto nos da un margen de error tan pequeño que puede hacer el juego frustrante, sobretodo despues de varias partidas seguidas sin avanzar nada en la historia. Lo peor de esto es que solo tenemos un par de minutos para practicar el truco antes de cada partida, y aunque el juego nos permita hacer varios ensayos, la partida real siempre tiene algun imprevisto.

Con esto no quiero decir que el gameplay sea malo, todo lo contrario, me encanta. Pero es exigente. El juego pide mucho de ti, y al final la acumulación de errores lleva a la frustración. Pero no quita que el momento que consigues completar la estafa, es algo increíblemente satisfactorio. Si lo juegas con calma, avanzando lentamente (porque la historia ya veréis que importa más bien poco), seguro que es una gran experiencia. Un gameplay perfecto, divertido, y encima es precioso de ver. Pero no está hecho para jugarlo del tirón, como he hecho yo (ha sido bastante frustrante en varias ocasiones), y creo que tiene un gran potencial desaprovechado en su historia. Si tuviera un guion más completo, y una narrativa mejor desarrollada, que ayudase a tener un ritmo más pausado, tengo seguro que le daría el sello de calidad de la casa. Pero aun le queda todo eso por pulir.

También te puede interesar

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.