El género point and click es de los primeros en los que pude enfrascarme en mi PC Pentium 4. Aquella época en la que internet estaba empezando y los videojuegos aún estaban en una fase en la que todo era novedoso y rompedor. Los géneros no estaban tan definidos como ahora y, en definitiva, era solo el principio de lo que es ahora una industria a la que todos se quieren sumar.
El Point and click consiste en un escenario en el cual un personaje solo puede interactuar con un número limitado de elementos. Mediante el ratón nos posicionamos encima y clicamos el elemento para descubrir algún tipo de efecto.
Este tipo de videojuegos fueron muy acogidos como subgénero dentro de las novelas gráficas, en los que el eje central era un misterio a resolver y donde el protagonista que nosotros encarnamos debe ir investigando ese escenario para obtener más información, avanzando hasta resolver el misterio.
Los juegos como la saga Runaway o The Longest Journey, entre otros, son los que más destacaron en mi infancia descubriendo este género. El point and click que tan bien funcionaba con sus historias que te hacían querer saber cada vez más hasta dar con el misterio que envuelve a nuestro protagonista.

Anna Isobe y su misión para salva el mundo
En The Sundew acompañaremos a Anna Isobe, una cyborg que trabaja como agente de policía encargada de realizar misiones por el bien del mundo. Pero lo que no espera es lo que está por venir, llegando a tener en su mano la posibilidad de salvar el mundo. Nos encontraremos en Shibukawa, una gran ciudad perteneciente a un Japón ruinoso y donde habrá que explorar por diferentes localizaciones de la ciudad. También visitaremos alguna isla recóndita y la prisión más importante del luga. Todo esto llevando a cabo su misión por descubrir la conspiración que envuelve toda una investigación de la que depende el mundo. Una narrativa que claramente bebe de las historias de mundos cyberpunk como Blade Runner y que dan a la historia ese punto de originalidad a pesar de que el argumento sea «salvar el mundo».
Escenarios y mecánicas
En cuanto a las mecánicas del juego, al ser un point and click todos los escenarios se basan íntegramente en este sistema que nos hará que avanzar por la historia de una forma muy lineal, y que en Nintendo Switch tendremos varias posibilidades de control a la hora de manejar a nuestra protagonista:
- Modo portátil, el juego nos permite usar la pantalla táctil si así lo vemos conveniente.
- Los joystick de los Joycon pueden usarse mediante un puntero en la pantalla que simula el ratón de un ordenador e ir interactuando por el escenario hasta que encontremos elementos con los que interactuar.
- El uso de los botones R, ZR, L, ZL, que en mi opinión es el mejor de todos porque nos mostrará los elementos clicables, además de movernos entre todos ellos, lo que nos facilitarán el poder interactuar con el escenario de una forma más ágil.
Por otro lado tenemos unos coleccionables que tiran de nostalgia como son los space invaders, que podremos encontrar a lo largo de nuestra aventura entre otros guiños.

Por otro lado el estilo pixel art está muy logrado. Con escenarios bastante cuidados y muy vistosos en un mundo lleno neones, misterio y oscuridad que se ha sabido plasmar de una forma más que correcta. Y al añadir el apartado sonoro ala mezcla, The Sundew logra que nos sumerjamos en cada escenario.
Barreras y dificultades
En ciertos aspectos el título tiene sus carencias, como por ejemplo al empezar. Nos encontramos con una barrera para algunos jugadores que no se sientan cómodos al salir de su lengua materna, dado que The Sundew está solo disponible en Francés, Inglés y Alemán.
Además, si eres un poco novato en los juegos point and click, se echa en falta algún tutorial inicial que te aconseje como abordar la interacción con el escenario, que en algunos casos puede ser compleja al no conocer los controles. También, en ciertas zonas, hemos notado dificultades a la hora de interactuar con elementos que aún no estaban activos hasta avanzar un poco más en al historia, lo que en cierto modo hace que estemos perdidos.
Estos aspectos negativos son más que entendibles en un juego hecho por un estudio integrado por una única persona y de tan reciente creación, así que esperamos que en el futuro sigan teniendo éxito y financiación con títulos con tanto potencial como este.
Vuelta a la infancia
The Sundew es una buena aventura gráfica que ha hecho que vuelva a mi infancia, a esos momentos en los que me enfrascaba en la historia metiéndome en la piel de Anna Isobe en este caso, interactuando con el escenario resolviendo puzzles y descubriendo la historia. Es un título que recomiendo a todos los fans de este tipo de género que lo van a poder disfrutar si el idioma no les supone un hándicap.

El estudio encargado de The Sundew es Studio 2054 que es un estudio unipersonal integrado por Agnès Vuillaume, apodada Clemenc con formación en TI y pintura. Es una gran fan de los videojuegos retro y los mundos distópicos.
The Sundew se encuentra disponible en Steam para PC y Linux y en Nintendo Switch con un descuento de lanzamiento.