Pokémon vive una época de cambios. Este año hemos tenido spin-off como Pokémon Snap, el exitoso Pokémon Unite de Tecent y posteriormente los anuncios de Pokémon Diamante Brillante y Perla Reluciente, junto a Leyendas Pokémon: Arceus. Ahora, 15 años después desde el lanzamiento de Pokémon Perla y Diamante para Nintendo DS, los remakes para Nintendo Switch son una realidad. Además, por primera vez un juego de la saga principal no lo ha desarrollado Game Freak, ya que están enfocados en el desarrollo del ambicioso Leyendas Pokémon: Arceus. En el caso de los remakes de Nintendo DS, ILCA es la desarrolladora responsable, con la supervisión de Masuda por parte de Game Freak. ¿Convence esta vuelta a lo clásico? Os lo cuento.
La jugabilidad clásica de Pokémon
Empezar mi aventura en Sinnoh ha sido como volver a casa, es un remake totalmente fiel a los juegos originales y me ha transmitido las mismas sensaciones que cuando jugaba de niño con mi Nintendo DS. Aquí todo será prácticamente igual, pero con un lavado de cara gráfico. Artísticamente me han parecido preciosos, muy coloridos, con reflejos muy bien conseguidos y con bonitos efectos del agua al usar surf. Pese a las críticas, creo que el estilo chibi queda bastante bien, pues sigue respetando el estilo visual que se empleó en Nintendo DS. ¿Qué podría haberse aprovechado la capacidad de Switch para hacerlo mejor? No digo que no, pues puede verse como un paso atrás con respecto a las ediciones de Espada y Escudo, excepto en los combates. Son muy similares, pero sus escenarios me parecen los más bonitos de cualquier juego de la saga.

Un juego muy cuqui, pero sin evolucionar
Las animaciones también me han gustado tanto dentro como fuera de los combates, ver a nuestro compañero pokémon siguiéndonos por el mundo es una monada. Aunque tengo que decir que el tamaño de los pokémon no está bien representado. Además, no están bien implementados, ya que a menudo nos chocaremos con ellos y nos entorpecen un poco en el camino. Y ya que lo menciono, nos chocaremos mucho con el entorno debido a que ahora podemos movernos en cualquier dirección, incluso en diagonal, pero el juego está basado a escala en los originales, más pensado para el control de la cruceta (4 direcciones) de la Nintendo DS.
Estos fallos, aunque no son para nada graves, me hacen pensar en la falta de experiencia por parte de ILCA, como también algunos bugs que he encontrado en mi partida. Diría que nada grave, pero tuve que reiniciar el juego porque se me congeló en la Liga Pokémon, y eso es preocupante. Por lo demás, prácticamente en lo técnico todo va perfecto y fluido, con pequeñas caídas de frames en algunas zonas.
El camino a la Liga Pokémon
Nuestra misión vuelve a ser la de completar la Pokédex que nos dará el profesor Serbal y nos iremos fortaleciendo en los distintos gimnasios de la región hasta conseguir las 8 medallas, que nos dan acceso a la Liga Pokémon, la cual hay que superar para convertirnos en campeón.
Comenzaremos la aventura a la par que Israel, el rival, un chico inquieto cuyo sueño es ser el campeón. Me parece de los mejores rivales de la saga, ya que la mayor parte de la aventura va por delante nuestra, venciendo antes a los líderes de gimnasio, y acaba con un nivel bastante elevado. Mientras capturamos pokémon y vencemos a los líderes de Sinnoh, conoceremos la historia de la región, que nos cuenta los orígenes del mundo Pokémon y la historia de los legendarios Dialga y Palkia. Por el camino nos enfrentaremos al Equipo Galaxia, recorreremos diversas zonas de la región y conoceremos personajes peculiares como la carismática Cintia, posiblemente uno de los mejores personajes de toda la saga.

Todo esto lo conocemos ya, pero, tantos años después, ¿sigue funcionando la fórmula en Switch? Mi respuesta es sí, sigue siendo tan divertido como siempre, pero con matices. Por ejemplo, no me ha gustado volver a los combates aleatorios, me parece que haber tomado esta decisión es dar un paso atrás después de comprobar lo acertado que fue la inclusión de los pokémon por el mundo y decidir si enfrentarte a ellos o evitarlos. Volver a encontrarme Zubats y Geodudes cada dos o tres pasos en las cuevas me ha obligado a ir siempre cargado de repelentes.
Eso sí, me alegra volver a esas cuevas y rutas donde no todo es tan lineal y fácil como en los juegos más recientes. En algunas como la Calle Victoria, incluso puedes llegar a perderte un poco, echaba de menos esto. También pasa con los puzles de los gimnasios, que aunque cortos y sin ser difíciles, son entretenidos.
Llegaré a ser el mejor, con ayuda del juego
Por lo general, Sinnoh me ha parecido una de las mejores regiones de toda la saga. Es enorme, tiene una gran diversidad de zonas, multitud de entrenadores y muchísimas cosas por hacer. Quizá hubiese disfrutado mucho más de los combates con entrenadores y líderes de no ser por la prácticamente nula dificultad del juego. Esto se debe a que no podemos desactivar el repartir experiencia en ningún momento, por lo que, si le damos continuidad a un mismo equipo Pokémon, estos les sacarán bastante más niveles a los rivales. A esto hay que sumarle la felicidad que ganan nuestros Pokémon, que hacen que estos se pasen muchos combates pegando críticos y aguantando con 1 PS, por lo que hace de estos remakes más fáciles que sus juegos originales.

El subsuelo en Pokémon Diamante Brillante y Perla Reluciente
Sin duda, lo que más me ha gustado de estos remakes es la mejora del subsuelo. En él nos encontramos zonas tan diversas como la propia región, montones de Pokémon por capturar (cabe decir que la captura aquí se vuelve más difícil), la inclusión de las bases secretas en las que puedes colocar estatuas de pokémon que vas encontrando en el minijuego de picar las paredes, donde además te puedes encontrar fósiles, gemas y otros objetos.
Además, puedes jugar online o local y encontrarte con tus amigos en esta zona. Todo esto hace que en su conjunto sea el mejor añadido de estos juegos y llega a ser muy adictivo. Aunque podemos visitar el subsuelo casi al inicio de nuestra aventura, también dará para muchas horas de postgame una vez acabemos, ya que a medida que avanzamos se desbloquean nuevas zonas y con la Pokédex Nacional se incluyen más pokémon.
Muchas cosas por hacer
Además del subsuelo, tenemos contenido para rato. Podemos comprar diferentes conjuntos de ropa y decorar con sellos nuestras pokéballs. También vuelve el Poké-reloj, donde usaremos MO y otras funciones, podemos volver a plantar bayas, usar la Pokochera para hacer Pokochos y participar en los concursos Pokémon, que han sido mejorados en estas versiones. Completar la Pokédex, como siempre, también nos dará para bastantes horas, con 493 especies, los mismos que en los juegos originales. Por primera vez unos remakes no contienen todos los pokémon existentes hasta la fecha, limitación que ya existe en Pokémon Espada y Escudo.
Una vez más, tendremos una gran cantidad de pokémon legendarios para atrapar en ambas ediciones con la inclusión del Parque Hansa. Para los nuevos jugadores está muy bien, pero para los veteranos no supondrá novedad alguna.

También podremos intercambiar y combatir en la sala multijugador. Y una vez seamos campeones de la Liga Pokémon, tendremos acceso a nuevas zonas de la región, donde se encuentra la Torre Batalla. Incomprensiblemente, no incluye los demás contenidos del Frente Batalla o el Mundo Distorsión, entre otras cosas, que fueron implementados en Pokémon Platino. Es lo que creo que le ha faltado para considerarlo un juego muy completo.
Tampoco esperéis torneos oficiales para los combates en estos juegos, ya que The Pokémon Company seguirá enfocada en Espada y Escudo. Pero, desde mi punto de vista, como jugador de la octava generación al que no le convenció la mecánica del Dinamax, disfrutar de los combates con amigos en estas ediciones me parece divertidísimo. Eso sí, sigo sin entender la ausencia de la cámara lucha para grabar combates y volver a limitar la duración de los combates en 20 minutos una vez más.

Conclusión
Recorrer Sinnoh es jugar a un Pokémon clásico de toda la vida, con lo bueno y con lo malo. Yo personalmente lo he disfrutado mucho y sigo prefiriendo este tipo de juego, donde todo se hacía con más mimo. Las rutas y cuevas no son un paseo y los líderes son fuertes, aunque en estas versiones se ha simplificado demasiado y no suponen apenas un reto en casi ningún momento de la aventura. Toda dificultad reside en la Liga Pokémon, una de las mejores ligas de toda la saga. También el postgame y el subsuelo están a otro nivel.
La región me parece de las mejores, artísticamente es una delicia y su banda sonora remasterizada la vas a querer escuchar una y otra vez. El juego en sí da para muchas horas, con importantes mejoras como la del subsuelo. Si estás aquí por la nostalgia o eres nuevo, estoy convencido de que los vas a disfrutar mucho. Para los jugadores que buscan un reto mayor, no encontraréis aquí satisfacción alguna. Quizá ILCA ha sido demasiado conservadora y no hayan desarrollado los remakes que todos deseábamos, pero divierten. Y eso es lo que creo que al final hacen recomendables Pokémon Diamante Brillante y Pokémon Perla Reluciente.