Astral Ascent, es el segundo título de Hibernian Workshop. Que ya ha salido con acceso anticipado tras el exitoso Kickstarter que lanzaron el año pasado para financiarlo. En este roguelike te embarcarás en una aventura para escapar del místico lugar en el que te encuentras y por derrotar a los signos zodiacales, misteriosos guardianes que se interpondrán en tu camino.
Al comenzar, conoceremos El Jardín. Un lugar en apariencia idílico, con distintos matices de personajes y colores. Pero que en realidad resulta ser una prisión astral en la que sus residentes ni siquiera conocen el motivo de su encierro. Lo que sí conocemos es que para escapar hay que derrotar a 12 guardianes zodiacales, poderosos guardianes que se interpondrán en nuestro camino de huida.
En un principio, y como parte de que el juego haya salido como acceso anticipado, conoceremos a dos de nuestros personajes jugables, Ayla y Kyran, pero a los que en un futuro se les sumarán Octave y Calie. Haciendo un plantel de cuatro personajes en total.
La introducción

Tras escoger personaje, podemos adentrarnos en uno de los biomas disponibles, como Fragmented Plains. Una vez allí tendremos un pequeño tutorial que nos enseñará la base del juego. Por una parte podemos encadenar golpes con nuestros ataques básicos, que podemos usar para derrotar a enemigos débiles y recargar nuestro maná. Nuestro maná nos permitirá utilizar nuestras casillas de hechizos, que al comenzar estarán ocupadas por la misma habilidad, de forma que al obtener una nueva magia podremos sustituir una de las casillas repetidas. Por otra parte, contaremos con la capacidad de consumir una pequeña cura, en caso de que hayamos obtenido una durante la exploración. También, tendremos la opción de vivir la exploración con un amigo mediante el modo cooperativo del juego.
Cabe destacar que desde el primer instante también podremos realizar un doble salto y un dash. Detalle que no sólo influye en el apartado mecánico, sino que también añade a la ambientación. Astral Ascent es un juego alegre, y lo transmite desde un primer momento por su paleta de colores, llena de tonos vivos, su música vivaz y su ágil movimiento. Rodeado por esta ambientación es muy disfrutable. Explorar corriendo mientras encadenas saltos con desplazamientos, además, durante tu exploración te encuentras pequeñas marcas en forma de rombo que funcionan como plataforma, de forma que si la golpeas puedes ascender más de lo que te permiten tus saltos normales.
Explorando

Esta sensación que consiguen transmitir a la hora de explorar es importante. Y hablando de exploración, según avances en los niveles te irás encontrando pequeños enemigos, la mayoría fáciles de derrotar con un par de golpes y un hechizo aleatorio, pero otros con un poco más de complejidad. Por ejemplo, hay un enemigo que parece algo similar a un simio hecho de plantas, que tiene una barra de vida mayor y que hace, a su manera, de minijefe. Con él experimentaremos lo que es tener que pensar antes de atacar, ya que tiene una mayor cantidad de vida y ataques, que a pesar de ser sencillos de evitar fijándote, te comerás sí o sí al golpear sin atención, por lo que resulta un buen aprendizaje antes de encontrarte con oponentes mayores, como lo pueden ser los guardianes zodiacales.
Al terminar de explorar todo un nivel nos encontraremos con la posibilidad de explorar tres salas distintas, añadiendo ese nivel de aleatoriedad típica de los rogue. Quizás nos convenga explorar un nivel que contiene un hechizo nuevo o quizás deberíamos escoger la sala de descanso, en la que poder curarnos un poco antes de seguir nuestra aventura. Y es que precisamente no todas las salas son vergeles de enemigos, las hay también que nos sirven para repostar como el bar Andrómeda en el que podremos gastar las estrellas (monedas) obtenidas en las instancias anteriores para tomar una bebida que potencie nuestra velocidad de ataque, la cantidad de nuestra vida o el daño de nuestros golpes.
Conclusión
El desarrollo de Astral Ascent todavía no ha terminado, quedan personajes por probar y jefes a los que conocer. Y por ahora, no está disponible en castellano, lo que quizás represente algún impedimento para algunos jugadores. Pero su base es sólida. La parte de juego disponible es lo suficientemente interesante como para que deje entrever lo que probablemente se convertirá en uno de los roguelikes de referencia en el panorama indie. Sin duda, indispensable para cualquier aficionado del género.
Así que mientras termina su desarrollo, sólo nos queda una cosa por hacer, y es esperar contemplando al firmamento, aguardando el momento en el que podamos desafiar al zodiaco mismo.